Tayrmund está poblada por diez grandes razas. Como si de diseño divino se tratara, como si un plan mayor las hubiera llevado hasta allí, cinco de ellas conforman el Imperio de Tygard, en le norte, mientras que las otras cinco, lo hacen en el Imperio de Draënark, en el sur.

El imperio del Águila de Plata.
Los pueblos del norte son conocidos por su honor y su nobleza. En algunos casos como los Eaglafoul de Isilion, su fiereza los caracteriza, mientras que los medianos, son un contraste de naturaleza tranquila y peligrosa al mismo tiempo. En las grandes y misteriosas montañas de Kräigad, los enanos trabajan en las profundidades con paciencia y precisión. Los Kal’Athil, elfos de los bosques, custodian las vastas tierras de Livdarin, su magia y su luz. Mientras, Tygard, bajo la recta mirada del emperador Aeneas, Águila de plata, se mantiene firme con sus poderosos ejércitos y máquina de guerra, incluso en tiempos de paz.

El imperio de La Reina Araña.
Al sur, junto a la cuna de las civilizaciones de Tayrmund, los hilos de La Reina Araña vigilan un sinfín de vidas. Las Kal’Assel, elfas oscuras, gobiernas un imperio sin igual. Al este, eternos enemigos y al mismo tiempo poderosos aliados: los Orcos de Orktalamh, una raza feroz y caótica en apariencia. Al oeste, los Daonna de Svadis, el eterno desierto, cuna del mundo, hombres y mujeres del fuego. Al norte, en unas tierras llenas de magia ancestral y custodiada por los grandes espíritus animales, los Aimhdaonna moran con tradición y honor. y más allá de la sabana del este, en una isla llena de oscuridad y tinieblas, los Krauja luchan contra una maldición de sangre antigua.